MANUEL SERRANO (MÉXICO, 1814-1888) JUGADORES Óleo sobre tela Firmado al frente “Serrano” Detalles de conservación y perforación 49 x 61 cm Mediante el género costumbrista en la pintura nacional, se buscaron plasmar las costumbres, tradiciones, usos y conductas que componían una parte importante de la identidad comunitaria dentro de diversas localidades de un México cuya independencia aún no pasaba de los 100 años. A través de su obra, Manuel Serrano se establecería como uno de los más emblemáticos representantes del género al recrear las escenas de esa nación joven en plena búsqueda de una identidad propia, y sería en la vida del campo y las periferias que componían la mayor parte territorial del país, donde encontraría múltiples manifestaciones de esa naciente identidad. Su trabajo documentó de manera autodidacta, los pequeños momentos que sucedían entre las poblaciones locales paralelamente a las grandes narrativas nacionales, retratando la vida diaria de quienes habitaban México mientras acontecían los grandes sucesos que cambiarían su futuro. El legado pictórico de Serrano exhibe un acto de reafirmación identitaria a través de la representación de la cotidianeidad de estos individuos, cuya realidad, sería la de la mayoría de la población de la época. La pieza en cuestión titulada "Los jugadores", nos presenta al grupo titular dentro de un espacio doméstico llevando a cabo una partida de cartas, podemos apreciar la convivencia y el sentido de comunidad entre las expresiones de los personajes y su cómoda disposición en la escena, quizás se trata de un ameno momento de liviandad entre tragos y risas, tras un arduo día de trabajo en el campo. Aquí Serrano capturó con gran veracidad la naturalidad de ese entorno rural y a quienes compartieron ese instante de diversión dentro de su rutina laboral. Fuente: Xavier Moyssén, "Manuel Serrano. Un pintor costumbrista del siglo XIX", en: Anales del Instituto de Investigaciones Estéticas, 16 (64), pp. 67-74. UNAM, 1993.