HORACIO RENTERÍA ROCHA (MÉXICO, 1912-1973) RETRATO DE NIÑA CON PERROS Firmada: Horacio Óleo sobre tela Detalles de conservación 60 x 45 cm Horacio Rentería Rocha nació el 21 de octubre de 1912, en Durango, lugar en el que durante su infancia se dedicó a pintar las fachadas de las casas de Analco, su pueblo natal, con barro, cal y trozos de carbón quemado. Después de completar su Licenciatura en Matemáticas en la Universidad Juárez, trabajó como profesor de francés y español en Durango y en Gómez Palacio, paralelamente se dedicó también a la enseñanza de las matemáticas y el dibujo constructivo. En ese período comenzó su labor artística y entre otras obras, pintó el magnífico mural en la escuela secundaria Guadalupe Victoria de Durango en 1932, siendo alumno del famoso pintor William des Lourdes. A principios de la década de 1930 se quedó viudo y decidiendo continuar su carrera como artista de manera permanente, renunció a su puesto de profesor (oficial) del Estado. En 1940 recibió del gobierno de Lázaro Cárdenas una beca para estudiar el arte de la pintura en la Academia de Arte de San Carlos, sin embargo, su estancia fue muy corta debido a la falta de ingresos. Lo anterior no impidió que Rentería continuara desempeñándose como pintor en la Ciudad de México, en la que conoció al marchante de arte Agapito Engels en 1948, quien le encargó retratos infantiles realizados a la manera del siglo XIX, en escenarios costumbristas populares. Horacio tomó de modelo a sus hijos y los retratos se vendieron rápidamente, por ello comenzó a trabajar sobre pedido de clientes que llevaban las fotos de sus hijos para ser inmortalizados. Es importante señalar que Horacio se mantuvo al margen de la mayoría de sus compradores, por lo que se creó un mito en torno a su persona, ya que llegó a existir la creencia de que en realidad se trataba de un artista de un siglo atrás.