SAN JUAN NEPOMUCENO MÉXICO, SIGLO XVIII Óleo sobre lámina Detalles de conservación, desprendimientos de capa pictórica 46 x 34 cm En esta obra San Juan Nepomuceno viste, según la tradición iconográfica, la sotana negra y el alzacuellos. Puede observarse al santo en actitud contemplativa con las manos entrecruzadas, con la cabeza rodeada de un nimbo con cinco estrellas. Del mismo modo, el querubín ubicado a sus pies del lado izquierdo, pide silencio en alusión al secreto de confesión y asimismo sostiene la palma como señal del martirio del santo. Por otro lado, el querubín del lado derecho le ofrece el crucifijo como una invitación a seguir a Jesucristo. San Juan Nepomuceno, es un santo de origen checo que vivió y murió a finales del siglo XIV. Aunque su culto se desarrolló muy pronto, extendiéndose por toda Centroeuropa, no fue canonizado hasta 1729 por Benedicto XIII. Llegado a España gracias a la acción de la Compañía de Jesús, el archiduque Carlos de Austria y la devoción que le tenían los primeros Borbones, nobles y clérigos, disfrutó de una extraordinaria popularidad durante todo el siglo XVIII, misma que se duplicó con creces en el Nuevo Mundo.